El 2018 ha sido un año lleno de noticias relacionadas con el mundo científico y tecnológico, cargado de sorpresas que han creado en el imaginario mundial ciertos momentos que serán recordados en el futuro, como lo fue, el aterrizaje del Insight en la superficie de Marte.
Por el momento, no se conoce exactamente el alcance que podrán llegar a tener estos hallazgos, lo que sí es seguro es que han sido, y seguramente serán, determinantes en unos años. Te compartimos los cinco avances tecnológicos más importantes del año.
1. El establecimiento del IoT
El IoT (Internet of Things) es un factor crucial a la hora de entender el futuro. Este 2018 se ha producido la confirmación de esta tecnología, que será puntera de aquí a pocos años, y supondrá una nueva industria tecnológica al alza.
2. La computación cuántica
Se trata de computadoras mucho más rápidas y eficaces que las que estamos acostumbrados, teniendo la posibilidad de solucionar problemas en un tiempo récord, teniendo la capacidad de procesamiento mucho mayor. Este año ha sido clave para su presentación y se espera que dentro de poco tiempo sea una de las tecnologías más usadas.
3. El futuro de la robótica
Uno de los avances tecnológicos del año ha sido la presentación por parte de Boston Dynamics de sus prototipos de Atlas y SpotMini, robots que simulan el cuerpo humano y el de los cuadrúpedos que saldrán a la venta en 2019.
4. La existencia de agua en la luna
Pese a no ser un avance como tal, este hecho propiciará nuevos avances tecnológicos. El descubrimiento y la confirmación de la existencia de agua en la luna será un elemento clave de cara a la posible colonización de nuestro satélite, generando un nuevo interés lunar, y con ello, una nueva carrera aeroespacial.
5. El Falcon Heavy, el cohete más potente del mundo
Aunque ya de por sí es una verdadera conquista poner en órbita el cohete más potente del mundo, la importancia del hecho radica en la incursión en la carrera espacial de inversión privada. Hasta ahora, la única fuente de información espacial provenía de los diferentes gobiernos, como la NASA (EEUU), o Roscosmos (Rusia). Por lo tanto, la entrada de capital privado va a suponer un crecimiento exponencial en el ámbito aeroespacial.